Muchas veces no estamos contentos con lo que somos. Pensamos que todo el mundo es mejor. No nos gusta nuestra cara, nuestro apellido; ni siguiera el lugar donde nacimos y vivimos! Entonces nos desanimamos y queremos convertirnos en la copia de los demás Actuamos como la gente quiere que seamos...
Para recuperarla tienes que aceptar que no eres perfecto, pero que te quieres a ti mismo, valoras y aceptas lo bueno que tienes.
Una persona con autoestima positiva sabe que no es perfecta, pero, se gusta como es, se acepta y valora todo lo bueno que tiene. Trata de cambiar con paciencia sus defectos, pero porque él o ella así lo quiere, y no sólo por dar gusto a los demás.