Dr. Gabriel Barrera Moncada
Conceptos previos
Actualmente, diversos autores y muchas instituciones educacionales siguen la clasificación de la Oficina de Educación de los Estados Unidos, de las llamadas dificultades de aprendizaje en dos grupos: a) dificultades especificas para designar a aquellas referentes a las presentadas para aprender a escribir, a leer, para comprender cálculo matemático, rechazo o fobia escolar; y 2) dificultades no especificas o trastornos funcionales de aprendizaje o disfunciones escolares que son aquellas que provocan un bajo rendimiento debido a causas orgánicas o inorgánicas o mixtas. Este último grupo es el más voluminoso, y el más accesible para ser dilucidado, orientado y resuelto por el médico. Las dificultades especificas tienen muy poca frecuencia (alrededor del 5% dentro de la población general escolar), indudablemente, pertenecen al campo del especialista (psicopediatra, psicólogo o psicopedagogo).
Frecuencia
Las dificultades generales o disfunciones escolares tienen una frecuencia de cierta consideración. De acuerdo a la encuesta entre varios países de Wall realizada para la UNESCO, su frecuencia fluctúa entre el 20 al 30% de la población escolar general, dependiendo del nivel socio-económico y cultural de cada región o país; de tal manera que un médico que trabaje aún en áreas urbanas poco concentradas, no escapa a este tipo de consulta.
Importancia de su conocimiento
1. Por su gran frecuencia, como se deduce de lo antes dicho. Se puede decir, que de cada 10 adolescentes consultantes, por lo menos 4 ó 5, lo hacen por dificultades escolares.
2. Porque muchas voces, las disfunciones escolares están condicionadas o asociadas a enfermedades crónicas; como: asma, epilepsia, diabetes, reumatismo, defecto físico, etc.
3. En algunas ocasiones una consulta concentrada en un bajo rendimiento escolar, puede conducir al descubrimiento de un factor emocional no expresado; como por ejemplo; una gran preocupación por baja talla, inferior a la de sus compañeros del colegio.
4. Porque los padres o representantes generalmente ocurren en primera línea al médico para preguntar sobre esta clase de problemas, por lo menos en lo que toca a una orientación preliminar.
Las actitudes adecuadas del médico
Lo indispensable es que el médico adopte una actitud de amable receptividad, de comprensión y disposición amplia para oir todo tipo de interrogantes o de preocupaciones respecto a la actuación escolar, ya que vengan de los padres o del propio adolescente.
El médico debe tener presente que para el adolescente la actuación en la escuela, colegio o liceo es trascendental como lo es el oficio o profesión para el adulto. Es el campo donde el adolescente siente y le preocupa su éxito o fracaso, su aceptación o su rechazo, su poder físico o espiritual, su felicidad o desdicha; todo esto dentro de la relatividad de su propia apreciación.
Lo que no se debe hacer:
1. No prestarle la atención debida a esta clase de consultas.
2. Hacer de inmediato referencia a "especialidades" (psicólogo, psicopedagogo, neurólogo, fisioterapeuta, electroencefalografista, etc.). Como lo demostraremos adelante, cualquier médico siguiendo una metódica clínica apropiada, puede resolver la mayor parte de problemas escolares o cuando menos después de su evaluación, saber que tipo de referencia requieren algunos pocos casos.
Factores etiológicos
Siempre es conveniente que el médico conozca las causas de estos problemas, aunque hay que apuntar que los especialistas y principalmente, los educadores, no se han puesto de acuerdo respecto a la clasificación etiológica de los problemas escolares pues a voces puede estar involucrado un sólo factor, pero la mayor parte de las voces existe una combinación polifactorial. Sin embargo, desde el punto de vista práctico, vamos a establecer una lista de los principales factores, de acuerdo a nuestra experiencia y a la de varios autores.
Causas de los problemas escolares
Factores biológicos
Herencia o alteraciones disgenéticas. Condiciones teratogénicas.
Factores prenatales o perinatales: Aquí se destacan varias condiciones, como: muy bajo peso de nacimiento, asfixia u otras condiciones adversas.
Factores post-natales: infecciones, traumas, intoxicaciones del sistema nervioso, desnutrición severa, enfermedades endocrinas, disfunción cerebral mínima, hiperquinesia, déficits visuales o auditivos, torpeza motriz, enfermedades crónicas, etc.
Factores psicológicos
Alteraciones de la organización intersensorial (percepción visual, kinestésica, espacial, auditiva, presición motriz, visomotricidad, etc.).
Alteraciones socioemocionales (depresión, ansiedad, angustia).
Déficits de atención (el llamado síndrome de atención déficit disorder, de la terminología inglesa).
Bajo nivel de inteligencia (formas leves o sub-clínicas).
Defectos psicolingüisticos. Fobia escolar.
Factores socioculturales y educativos
Inadecuado o turbulento ambiente familiar.
Malas condiciones de la comunidad (privación psicosocial).
Inadecuadas estrategias pedagógicas. Desequilibrio de la planificación educativa (sobrecarga de tareas, etc.)
Falla acumulativa o insuficiente preparación para actuar en el grado escolar al cual asiste el joven.
Inadecuadas actitudes de los profesores y malas condiciones arquitectónicas y de equipos.
Tipos más frecuentes de consulta
1. Deficiente progreso o bajo rendimiento escolar «'boletín" del plantel con observaciones negativas o bajas notas).
2. Faltas de promoción a grados superiores ("repetidor de grados").
3. Déficits de concentración y atención.
4. Mal comportamiento escolar (agresividad, aislamiento, "payasadas", hiperactividad, hurtos, experimentación sexual, encopresis).
5. Desajuste escolar (expulsiones repetidas, hostilidad hacia los profesores, fugas de la escuela, hostilidad sistemática, etc).
6. Dificultades especificas de aprendizaje (en lectura, escritura, matemáticas).
7. Fobia escolar o rechazo para ir a la escuela o colegio.
Procedimiento práctico de evaluación de en problema escolar
El médico puede y debe seguir un procedimiento de carácter clínico que le permita, con cierta seguridad, valorar toda consulta sobre dificultades escolares, de la manera siguiente:
Entrevista con los padres
1. Es preferible hacerla sin la presencia del alampo. Los padres deben ser oídos con toda tranquilidad, tratando de evadir contestaciones apresuradas.
2. Preguntas algunos detalles; si el problema escolar ha coincidido con algún acontecimiento (comienzo de la adolescencia, cambio de colegio, muerte de un familiar, nuevos profesores, etc.)
3. Averiguar si los padres han pedido opiniones del supervisor, tutor o director del colegio.
4. Escuchar las opiniones o ideas que los padres tengan respecto al problema.
5. Aprovechar la entrevista para apreciar el tipo de relación que los padres tengan con el alumno; sobreprotección, negligencia, represión exagerada.
6. Historia clínica: continuar en esta entrevista investigando los antecedentes familiares o personales de trascendencia.
7. Vida actual del alumno, actitudes hacia la familia hacia si mismo y hacia profesores y colegio.
8. Respecto a relaciones intrafamiliares puede ser práctico saber en que forma se contesta a la pregunta: ¿cree Ud. que la relación con este joven ha sido muy rígida (represiva), equilibrada o consentidora?.
9. Por último, para hacer una valoración práctica del
carácter socioemocional del sujeto; se puede hacer esta otra
pregunta: cómo definiría Ud. a este joven dentro de los
siguientes términos:
Cariñoso o indiferente? | Expansivo o muy reservado? |
Controla impulsos o muy impulsivo? | Seguro o muy inseguro? |
Colaborador o negativo a todo? | Habitualmente alegre o triste? |
Obediente algo o rebelde siempre? | Responsable o desorganizado? |
Sociable o siempre aislado? | Entusiasta o muy poco entusiasta? |
Contento con el colegio o lo odia? | Lo rechaza sistemáticamente? |
Acepta parientes o los rechaza? | Tranquilo o muy angustiado? |
Si las contestaciones son positivas para la primera pregunta de
la izquierda (por lo menos en gran parte), esto significa que el
sujeto tiene una estructura socioemocionalmente favorable; al
contrario si las contestaciones a la pregunta del lado derecho
afirman cualidades negativas, quiere decir que muy seguramente
hay bastante sospecha de problema socioemocional, del alumno.
Entrevista con el adolescente
Es importante que esta entrevista se haga sin la presencia de los padres o representantes.
1. Oír las propias opiniones sobre el problema consultado y sus probables causas (autoculpa, causas intrafamiliares, error de apreciación de parte de profesores o padres, por incomprensión de ciertas materias, de parte de profesores o padres, por incomprensión de ciertas materias, creencia en falta de memoria o de concentración o retención, etc.
2. Opinión respecto a su familia o a su colegio o profesores. Preguntas como las siguientes pueden ayudar: ¿Qué opinas de tu casa?, ¿te sientes cómodo?, ¿qué es lo que más te desagrada de tu casa o de tu colegio?.
3. Observación por el médico de las actitudes del joven: ansioso, apático, rebelde, tímido, depresivo, triste u hostil.
Examen físico
Además de las especificaciones propias del examen físico de todo adolescente ya detalladas en otro capitulo, es conveniente revisar los siguientes aspectos:
1. Estado de crecimiento y madurez funcional (ver capitulo especial).
2. Defectos físico o enfermedad crónica.
3. Funcionamiento sucinto de visión (Escala de Sneller) y de audición con pruebas sencillas y rápidas.
4. Búsqueda de "signos blandos" en la exploración neurológica.
Evaluación mental breve
Algunos datos de sus antecedentes como los de retardo en las adquisiciones psicoevolutivas de la primera edad, pueden ser orientadas paa pensar en un retardo mental leve. (Es muy difícil que un alumno llegue a 4° 6 5° grado con un retardo mental de cierta consideración). Algunas preguntas fundamentales pueden obviar esta duda; como las siguientes: ¿A qué edad dió los primeros pasos?, ¿a qué edad expresó sus primeras palabras?, ¿a qué edad fue a 1° grado?, ¿este joven ha repetidos grados escolares?.
También se puede hacer una evaluación mental rápida, a través de la resolución o no, de las siguientes preguntas:
10 años
1. Dime dos razones o motivos por los cuales un alumno no debe hacer ruido en la clase?
2. Dime dos motivos por los cuales a los adultos les gusta más tener automóvil que bicicleta?
11 años
1. Que entiendes por reposar o por obediencia?
2. Dime: en qué se parecen estas palabras: culebra - vaca - pájaro?
12 años
1. Dime: ¿qué tiene de disparate o de loco la siguiente frase: "en un antiguo cementerio se ha encontrado una calavera pequeña que se cree que es la de Cristóbal Colón cuando era niño"?
2. Dime: "qué entiende por valentía" o "por caridad"?.
13 años
1. Fíjate bien: ¿qué entiendes por la palabra "constancia" o por la palabra "valentía"?.
2. Dime: ¿qué diferencia existe entre las palabras "pobreza y miseria" o entre "pereza y ociocidad?"
Evaluación de conocimientos escolares elementales
Algunos informes de educadores latinoamericanos y de acuerdo a una detenida investigación del autor, próxima a publicarse, se ha demostrado que alrededor del 60 al 70% del bajo rendimiento escolar en mayores de 10 años de edad depende de una insuficiente preparación académica para poder actuar adecuadamente en el grado escolar al que cada alumno asiste; déficit de preparación o de insuficiente aprendizaje casi específicamente lectura, manejo de números y escritura Por esto propiciamos que frente a todo caso de pobre rendimiento escolar se hagan las pruebas rápidas (de un minuto de duración cada uno) de lecturas y escritura, expuestas a continuación.
Prueba rápida de lectura
1. Disponer de un texto hecho con letras de tamaño corriente y mucho más practico tener a la mano (fotocopia) del texto que se trascribe al final (éste está construido con palabras sencillas a base de letras que tienen el mismo tamaño al que se usa en los libros de las materias para 4°, 5°, 6° y 7° grado escolar de educació básica). Al final de cada renglón de este texto se señala el número de palabras leídas.
2. Invitar al joven a que lea el texto en voz alta, previamente fijarse en el reloj (con demarcación de segundos), para tomar el tiempo de lectura durante un minuto.
3. Anotar o retener hasta cual palabra del mencionado texto llegó el alumno al término de un minuto.
4. Conocer el número de palabras leídas usando las cifras de las columna de la extrema derecha del texto. Por ejemplo: si el alumno leyó hasta "tres metros de largo"; "largo" es la última palabra, lo que quiere decir que leyó 92 palabras o sea 87 que contiene el anterior renglón, más 5 palabras del renglón siguiente.
Valoración: llevar el número de palabras leídas al baremo anotado en la gráfica del final ya dicha. Así: de acuerdo al ejemplo anterior de 92 palabras en un minuto, correspondería un nivel de lectura de 10 años. Si este nivel es de 1 año o más inferior a la edad cronológica del sujeto, muy seguramente la causa principal (a no ser que se encuentren otras de mayor peso), del bajo rendimiento, es la falla en lectura. Es lógico pensar que los déficits en lectura van irremediablemente a provocar fallas en el aprendizaje de todas las materias curriculares.
Prueba rápida de escritura
1. Suministrar lapiz y papel; de preferencia papel sin rayas. (Puede usarse el récipe del médico).
2. Usar reloj con segundero y dictarle al sujeto las frases que se presentan en la gráfica ya dicha; este dictado debe suspenderse al término de un minuto.
3. Conocer el número de letras que el sujeto ha escrito durante un minuto. Esto es fácil haciendo uso de la gráfica ya mencionado en donde en la sección "Dictado para la prueba de escritura", el número de letras escritas esta señalado por los números o cifras colocados entre parentesis; por ejemplo: si el sujeto ha escrito hasta "rodeado de", quiere decir que ha escrito 82 letras en un minuto.
4. Valoración: el número de letras escritas en un minuto, llevarlo al baremo guía expuesto en la gráfica. De acuerdo al ejemplo anterior, el número de letras 82, equivaldría a un nivel de lectura de 12 años. Si el nivel de lectura es de un año o más, inferior a la edad cronológica del sujeto, se considera como déficit en lectura de cierta consideración. Nuestra experiencia nos ha enseñado que los déficits en escritura son poco frecuentes, si se compara con el gran volumen y la importancia que tienen las fallas en lectura.
Otras pruebas simples: rápidamente se le pone al joven (en un récipe, cantidades de 2, 3, 4, 5 o más para que las lea, y ver entonces hasta donde es capaz de llegar a leerlas correctamente y sin dudas. También, de acuerdo a la edad, se puede poner al sujeto, una resta o ua división por dos más cifras.
PRUEBAS RAPIDAS DE LECTURA Y ESCRITURA (Duración: 1 minuto
cada prueba)
TEXTO PARA LEER (*) | No de Palabras |
Los miembros de la Sociedad Venezolana de Actividades Submarinas que realizaron la parte principal de la expedición de rescate de piezas del navío "San Pedro Alcántara", buque insignia de la armada de don Pablo Morillo, | 35 |
hundido junto a la isla de Coche hace ciento cincuenta años, fueron frustrados | 48 |
por motivo de que en ese sitio las aguas son muy turbias y tienen una | 63 |
profundidad de veinte y dos metros. Pero como premio a su esfuerzo, | 75 |
encontraron en un sitio cercano denominado los "Bajos de Cuspe" un cañón | 87 |
de tres metros de largo y dos anclas que pesaron dos toneladas, pertenecientes | 100 |
a un buque posiblemente más viejo que el "San Pedro Alcántara". La isla de | 114 |
Coche tiene una superficie de sesenta kilómetros cuadrados y se encuentra | 125 |
situada entre la isla de Margarita y las costas de Venezuela frente a una parte | 140 |
que tiene la forma como de una lengua de tierra dirigida hacia el mar, la cual se | 157 |
llama Península de Araya. En esta península se encuentran unas minas de sal | 170 |
común o sea la substancia que se emplea en las comidas dianas. | 182 |
(*) Para sujetos menores de 9 años de edad, usar un texto de
letras un poco más grande.
DICTADO PARA LA PRUEBA DE ESCRITURA
ERA UNA VEZ UN HOMBRECITO VESTIDO DE BLANCO QUE TENIA UN PERRO (51) (**) MUY BONlTO (60) CERCA DE UN LAGO (73) RODEADO DE HERMOSOS (90) ARBOLES CUYAS AGUAS (107) ERAN TAN (114) TRANQUILAS QUE (127) PARECIA UN (136) INMENSO ESPEJO (149) EN DONDE SE REFLEJABA (167) TODO EL PAISAJE (180).
(**) Los números entre paréntesis indican el número de letras.
BAREMOS GUIAS PARA VALORAR LOS RESULTADOS
LECTURA | |
Números de PALABRAS leídas en un minuto | Niveles de lectura en años de edad |
45 a 59 | 7 1/2-8 |
60 a 70 | 8 1/2 |
71 a 80 | 9 |
81 a 100 | 10 |
101 a 116 | 11 |
117 a 130 | 12 |
131 a 140 | 13 |
141 a 154 | 14 |
155 o más | 15 y más |
ESCRITURA | |
Número de LETRAS en un minuto | Niveles del escritura en años de edad |
30 a 40 | 7 1/2-8 |
41 a 46 | 8 1/2 |
47 a 54 | 9 |
55 a 64 | 10 |
65 a 75 | 11 |
76 a 86 | 12 |
87 a 98 | 13 |
99 a 115 | 14 |
116 o más | 15 y más |
Valoración general e integración
Haciendo integración de todos los detalles antes dichos, se puede llegar a una conclusión de muy cercana seguridad, la cual puede ser de dos tipos:
Dificultades menores, las cuales constituyen alrededor del 80 a 90% de frecuencia, tales como las siguientes:
1. Falsas dificultades: por errores de interpretación de los padres por demasiada exigencia, la que también puede sucitarse de parte de los profesores.
2. Déficits de conocimientos: suficientes para actuar en el grado escolar que cursa el alumno. Este es el problema más frecuentemente encontrado; y entre ellos, la falla en lectura o en adiestrameiento en manejo de números es lo que prevalece. Por ejemplo; un joven que curse 7° U 8° año de educación básica, que alcance un nivel de lectura de 3° o 4° grado escolar elemental, de ninguna manera puede tener un buen rendimiento.
3. Formas leves o sospechosas de retardo mental.
4. Enfermedades orgánicas crónica; como: hipotiroidismo juvenil, desnutrición, asma pertinaz, incapacidades físicas, epilepsia, efe. También algunas psicosomáticas, como: disfunción cerebral mínima, hiperquinesia, déficit de atención, etc.
5. Inadecuadas actitudes o condiciones del ambiente; como: atmósfera familiar turbulenta o de incomprensión para el adolescente, mala disposición del tiempo libre (actualmente los adolescentes abusan en el número de horas para la TV, y esto implica falta de tiempo para leer o para cumplir con las tareas educativas), exceso de actividades extraescolares (simultáneamente gimnasia, aprendizaje de música, ballet u otras manualidades), maestros rígidos que no estimulan los esfuerzos del alumno, inasistencia frecuente por la menor causa o bien, exceso de actividades sociales.
6. Desajustes socioemocionales leves de tipo reactivo; tales como gran angustia por turbulencia del hogar, tía por el estudio, rebeldía sistemática, hostilidad hacia el plantel, rasgos depresivos, etc.
Actuación práctica del médico
Las dificultades menores que son tan frecuentes pueden y deben ser tratadas por el pediatra o aún por el médico general con cierta preparación al respecto; de acuerdo a los hallazgos encontrados de la manera siguiente:
1. Si hay déficit de conocimientos para actuar en el grado al que asiste el alumno, éste debe recibir retuerzo pedagógico en las asignatuas en que tal cosa ocurra. En la práctica y en los lugares donde no se disponga de técnicos especializados (que en la mayor parte de los casos tampoco se necesitan), nos ha dado buen resultado, recomendar a los padres que un maestro o profesor vecino (para comodidad), le suministre al alumno clases especiales fuera de las horas escolares ordinarias (puede ser una hora, dos o tres voces por semana), en las asignaturas en las que el alumno falla. Cuando hay falla de lectura, este procedimiento es imprescindible.
2. Si el alumno está ubicado en un grado escolar superior para su edad o para su grado de madurez académica, se debe explicar a los padres que es más repetir un año escolar, que fracasar en los años venideros.
3. En casos de enfermedades crónicas se hará el tratamiento adecuado. Insistiendo con los padres que siempre el adolescent debe recibir un gran estimulo psicológico de parte del ambiente familiar.
4. Si se sospecha retardo mental, aún de tipo leve, se debe hacer una información adecuada a los padres a fin de que adopten actitudes de comprensión frente a las limitaciones del joven y se procederá a hacer las referencias a instituciones especializadas.
5. Para los desajustes socioemocionales se procederá de acuerdo con las instrucciones dadas en el capítulo correspondiente de este libro.
6. Las dificultades mayores son poco frecuentes (dificultades intensas de aprendizaje en jóvenes intelectualmente normales, cuadros psiquiátricos tales como: ansiedad intensa, síndrome depresivo franco, anorexia nerviosa, fobia escolar), y deben ser remitidas a servicios especializados o a profesionales específicos como: psiquiatras de adolescentes, psicopedagogos, terapistas del lenguaje, etc.
BIBLIOGRAFIA
Academia Americana de Pediatría. Apreciación de salud del
escolar. Editado por Mead Johnson.
1978.
Barrera Moncada G. Dificultades escolares. Archi Domini Pedía 1983; 9:42.
Cannon I P y Comton C. Disfución escolar en el adolescent. Cli Pedía North Am 1980. 1:81. Kandt R. Neurologic examination of children with learning disorders. Pedía Clini North Am 1984. 31,2:317.
Shaywitz S E y Shaywithz B A. Diagnosis and management of attention deficit disorder. Cli Pedía North Am 1984. 31,2: 429.
Tarnopol L y Tarnopol M. Comparative reading and learning difficulties. Lexington Books.
Lexington 1981.
Wall W D y cols. Fracaso escolar. Editorial Paidos. Buenos
Aires. 1980.